Informa con minuciosidad Libertaddigital sobre la entrevista que realizó esta mañana FJL a María San Gil. Impresionante. Muy relacionado el asunto con lo que venimos tratando: los problemas de la derecha. Así, San Gil invitaba a:
…las nuevas generaciones políticas a empezar desde cero, a reconstruir el país.
Desencantada con el viraje ideológico del PP desde la presidencia de Rajoy –cambio afianzado en 2009- María San Gil decía:
Desencantada con el viraje ideológico del PP desde la presidencia de Rajoy –cambio afianzado en 2009- María San Gil decía:
El futuro que veo para España después de los resultados electorales (con Bildu-ETA en las instituciones), con el Gobierno de Zapatero y con el futuro Gobierno de Rajoy es el de un país que se descompone.
¡El mundo cambia rapidísimo! Es el momento de las reformas. La izquierda, en delictiva trampa, quiere las porpuestas de los falsos indignados -en el fondo muchos de ellos solo están cabreados porque se acaba el chollo de la subvención-. Como me decía un político socialista del PSOE toledano, empresario trabajador y honrado: con la victoria del PP en Castilla la Mancha, aquí lo pasan mal los que vivían de esto desde hace 30 años…
Entonces, ¿quiénes son las nuevas generaciones que deben cambiar España? María San Gil comentaba que no se encontraba con ganas. Hace unos días comentaba aquí que se debe dejar paso a nuevas generaciones para los que las mentiras de la transición son cuentos del abuelo cebolleta…Y hay que rescatar a esos políticos estupendos que ha habido en España, a esos valientes del PP vasco y español, herederos o discípulos de Gregorio Ordóñez. Ellos son un ejemplo y su imagen puede aglutinar a tantísimos hartos de las traiciones del PP. La derecha que quiere una España unida formada por ciudadanos libres, no puede eludir la responsabilidad de organizar una UPyD por la derecha: moderna, seria, de amplia mirada y con sus matices pero con unos mínimos principios y valores comunes que permitan rescatar a esta gran Nación. No basta un cambio de Gobierno. Lo que hace el PP en el País Vasco debe ser para muchos la gota que colma el vaso. Cascos es un ejemplo a nivel regional de lo que pasa cuando el PP se equivoca. Puede surgir un Cascos en el País Vasco o a nivel nacional. Es el momento. ¿Qué tal os suena UNIDAD, ESPAÑA Y DEMOCRACIA?
Es una pena que muchos que podrían tirar del carro no tiren. ¡Muchos seguiríamos a María o a tantos héroes!
ResponderEliminarRuger
Maria San Gil o Santiago Abascal representan una derecha nacional, de valores y patriota.
ResponderEliminarPues que dejen el PP porque el PP es todo lo contrario y encima engaña.
ResponderEliminar¿Que te parece Blas, "valores y unidad"?
ResponderEliminarBuena idea VALORES Y UNIDAD. Estoy de acuerdo, y es porque en la derecha no termina de aparecer la alternativa necesaria y moderna que defienda la libertad. Por un lado, peperos que no quiren alejarse de las comodidades y los que se alejan como San Gil u Otaola, acaban asqueados o montando su reginalismo, Cascos. Y por otro, en la derecha seria, hay división de ciertos torpes ideólogos sin las cosas claras, fieles a un pasado remoto que les impide hablar a la gente de hoy.
ResponderEliminarA. Nestal
ESTO ES LO GRAVE
ResponderEliminarBildu se hace con la alcaldía de San Sebastián
Aunque el PP tiñe de azul el mapa consistorial, Bildu ya se ha hecho con San Sebastián. Hoy se constituyen más de 8.000 ayuntamientos.
Aunque yo estoy de acuerdo en el grueso de tu nueva entrada,Blas, tendría que hacer algunos matizaciones. Tanto Álvarez-Cascos como María San Gil, grandes políticos y valientes, no están de acuerdo con el PP de Rajoy, eso es verdad, pero ojo porque no parece que estén arrepentidos de lo que significó el PP de Aznar para la democracia española donde empezó la ambigüedad, no en el tema de ETA (que allí fue mas firme de lo que se es ahora y por eso lo echa de menos María San Gil), pero sí en otros muchos temas de sobra conocidos por todos (aumento del aborto, reformas amplias de Estatutos de autonomía, política nefasta en los medios de comunicación,no se levantaron las alfombras de la corrupción socialista de González, etc)y sin contar con que el PP se autodefinió como partido de centrorreformista cuando estas dos personas eran pesos pesados del partido y tenían mucho que decir al respecto.
ResponderEliminarMaría San Gil no está de acuerdo con la actual dirección del PP en el País Vasco y Cascos no lo estaba con la dirección del PP en Asturias (éste último solamente por intereses personales y/o estratégicos), pero sí sostuvieron políticas centristas y ambiguas,o por lo menos no las han criticado. Rosa Diez tambien colaboró con el PSOE hasta el año 2000 pero en su discurso actual, sí que rompe con todo lo que ha hecho el PSOE desvinculándose explícitamente y radicalmente.
Si se quiere hacer una UPyD de derechas, se debería tener claro el espacio a ocupar y ese no sería el centrismo reformista de los aznaristas sino el que representaba la Alianza Popular de los años 80, pero adaptada a los tiempos actuales, es decir la AP sin el famoso Congreso de Sevilla de 1989 que fue cuando el partido no sólo cambio de nombre sino tambien de principios para poder llegar al poder, un hecho que fue acertado para quitar el poder a los socialistas pero por el cual hubo que pagar un precio que fue dejar a España sin una derecha democrática de inspiración cristiana.
Tienes razón que para liderar un proyecto nuevo hacen falta personas de la talla de Cascos y San Gil, pero gente nueva.
Aspirante tiene razón en eso...Esta gente critica al PP cuando la dirección de su partido los aparta de puestos de poder, pero no cuando están en el meollo de la cuestión.
ResponderEliminarRecuerdo la nefasta expresión "movimiento nacional de liberación vasco" o la excarcelación de decenas de etarras por parte del PP en el que tenían mucho que decir San Gil y Cascos.
Efectivamente. En esencia, el PP es tan traidor y perverso como el PSOE. Lo que pasa es que hay mucha gente que lo pone en una balanza, y no se acaba de convencer. Pero, !Coño!. Unos han estado 8 años y los otros 21. Démosle tiempo al PP y dará el tiro de gracia a España.
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