LA POLÉMICA FINAL
La final sería el 10 de septiembre. Nunca imaginé la que se me venía encima. Hasta el momento, disfrutaba de cosas que nunca había imaginado. Conocía a personajes relevantes. Vivía el funcionamiento del directo en televisión. Conocía a personas con las que era fácil que surgiera la amistad. Pero todo empezaba, de pronto, a volverse verdaderamente raro. Dos días antes de la final, en un funeral de un personaje importante de la sociedad madrileña, al que fui porque se trataba del abuelo de un amigo mío, me dieron, de forma muy confidencial, una información impresionante. La persona que me sopló la noticia me dijo literalmente: “Tengo un buen contacto allí, olvídate Blas, la orden es clara: el nombre de Blas Piñar no puede ir a El Gato al Agua”. Yo, que nunca doy todo por perdido, no me lo creí del todo, y recurrí a todos los amigos y conocidos que pude para comprobar si eso era cierto. Confirmé lo que me decían y era verdad. Es más, se cumplió inexorablemente, como se ha sabido. El periodista y tertuliano, Román Cendoya, cercano a Julio Ariza y al PP, había dicho, según me comentaban, tanto en las oficinas de Intereconomía, como en una comida, como en una empresa en la que trabaja un conocido mío: “El problema no es que sea nieto de Blas Piñar, sino que se llama Blas Piñar y no nos conviene en El Gato, seremos considerados demasiado fachas. Si fuera nieto de Blas Piñar pero se llamara Pepe Martín, ningún problema”. Estuve pensando en no ir a la final. Todo me parecía falso. Al parecer, y para mi sorpresa, el mismo Eduardo García Serrano se opuso, en varias conversaciones, a que mi nombre apareciera en El Gato. Comprobar que esto es verdad ha sido muy desagradable para mí y para mi familia. Estaba sufriendo por temas de un pasado con el que no tenía que ver. Mi mujer estaba literalmente harta. Mi familia y amigos se indignaban.
Pero fui a la final. Mis presiones, las de mis amigos y contactos parecía que habían funcionado. Al ver a Gonzalo Bans antes del programa, me dijo: “Tenemos que hablar, me han dicho que vas diciendo por ahí que no te dejaremos ganar por tu nombre. No es cierto, el hecho es que nadie me presiona como Director del programa”. (Menuda bola, visto lo visto). Contesté: “No, he dicho que se dice en Intereconomía que hay una orden de que no gane, lo cual, de ser cierto, me parece indignante”. Por conocidos pudimos llegar hasta varios directivos de Intereconomía y otros personajes influyentes. No se me podía tratar así por mi nombre. Solo pretendíamos justicia y que ganara el mejor. La final del 10 de septiembre fue uno de los momentos más desagradables de mi vida. Los que estaban en ese plató saben lo que ocurrió. La verdad siempre es sencilla. Hubiera preferido no haber participado viendo aquél espectáculo bochornoso. Desde el primer momento, la agresividad de Román Cendoya, miembro del jurado, fue manifiesta: “Aquí ni nombres ni redes sociales”, dijo con aspecto crispado. En su afán de controlar el resultado, le vimos, en uno de los descansos, dando instrucciones al resto del jurado, Isabel Durán y Eduardo García Serrano. Y vimos a Isabel decir: “Román, si es que a mí el que me gusta es Blas”. Siempre estaré contento de cómo me comporté en esos minutos finales, a pesar de lo extraño del momento, que se puede ver en Youtube. Isabel Durán reconoció: “Blas Piñar se ha portado como un señor, y eso dice mucho”. Esto es lo importante.
Sigue mañana lunes antes de las 8h
Yo creo que lo mejor es que cuentes todo de una vez, llevas mucho tiempo sin dar explicaciones, entiendo que querías tenerlo todo bien pensado, has debido de pasarlo mal, pero los que te votamos seguimos sin entender cómo ha podido pasar todo y si Intereconomía no nos lo explica, me alegro de que tu lo intentes...Gracias por tu esfuerzo. Me gusta el tono positivo que te lo tomes con humor y aprendas la lección.
ResponderEliminarMe hubiese gustado ver si un nieto de Santiago Carrillo ( Asesino demostrado no como Blas Piñar Abuelo que lo unico que ha hecho es defender una ideas sin hacer daño a nadie) hubiese sido tratado igual de mal. Lo peor de todo es que esto ocurre en casa de "los buenos"... De los buenos acomplejados. Ese es el problema de la derecha española el avergonzarse de NADA. Desde los políticos hasta los periodistas. Y eso demuestra la poca influencia que sienten poder hacer sobre la sociedad española pues prefieren no tocar ciertos temas que ni pueden argumentar. Soy hijo de la famosa transición pero empiezo a estar harto de la generación anterior que no hace más que repetir como la abuela cebolleta el rollo ( valido en su momento) de la transición. ¿ podríamos transitar hacia el siguiente paso por favor?
ResponderEliminarRDL
Fue una estafa, un engaño, un escándolo... Y supongo que para ti, una mala pesadilla. Seguramente, el descanso en el que Cendoya intentó manipular al jurado fue en el segundo. Pasaste de tener de 16-15 ptos. en las primeras 2 fases a 3-6 ptos. en las 2 últimas.
ResponderEliminarPara el que no lo sepa, si no hubiera habido votos del público, Blas hubiera quedado último con mucha diferencia.
Ahora, no deja de tener gracia que, con todo en contra (empresa, jurado, presentador, normas...) el marcador te señalase como ganador.
Por cierto, ayer estuve en el teatro viendo El Alcalde de Zalamea. Me acordé de este blog y de la recomendación de su autor de leer y ver esta obra teatral. No puedo dejar de darte las gracias: ¡fue sensacional! ;)
Saludos.
Nadie puede poner en duda la honorabilidad y calidad humana de tu persona ni la de tus familiares , quien lo hace es consecuencia de la insuficiencia ética y moral , dicho lo anterior sique luchando tal y como lo estás haciendo, España va por muy mal camino consecuencia de la falta de líderes en política , por consiguiente deja el mundo correr y sique perseverando con tus ideas más tarde o más temprano tus resultados brillaran pues muchas personas estamos a tu lado y te ayudaremos en todo aquello que tu necesites y este a nuestro alcance
ResponderEliminarme alegro de que lo cuentes y que la gente sepa lo que realmente ocurrió. para mi intereconomía ya no tiene ninguna credibilidad.
ResponderEliminarTendre que borrar a Cendoya de mi facebook. Eduardo Serrano no me gusta nada de nada, es un falton infame y un fachon anacronico.
ResponderEliminarSi esto es como tu lo cuentas ,vaya rollo ¡¡¡y yo que pense que me podia fiar de intereconomia ¡¡¡¡
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