Los que me siguen desde hace tiempo, conocen que este blog tiene como objetivo encontrar soluciones. Como se dice, parte de las soluciones se encuentran en el hecho de establecer cuáles son los problemas. Y así, antes de dedicarnos a iniciativas prácticas (aunque nos acusen de no posicionarnos en los grupos políticos, porque queremos estar por encima, en otro plano, analizando y denunciando), consideramos que, previamente, es fundamental obtener una formación profunda, conociendo nuestra Historia y nuestra Tradición.
Por eso, hoy quiero recomendar el libro que acabo de empezar a leer. Se trata de Historia de las formas del Estado. Una introducción. de Dalmacio Negro, editorial El buey Mudo, Madrid 2010.
Lo podéis adquirir aquí a buen precio:
http://www.criteriaclub.com/historia-de-las-formas-de-estado.html
Dalmacio Negro, Madrid 1931, es Catedrático de Ciencia Política del CEU y miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas.
En el breve prólogo adelanta con claridad lo que explicará en el libro. Y uno percibe inmediatamente que es un libro necesario para el que tenga inquietudes por los problemas políticos y la dramática situación en que se encuentra España.
Leer y entender verdades como “En la antigüedad, lo Político estaba integrado en lo Sagrado…Y era la forma en que lo Sagrado cuidaba de la unidad y la seguridad de la comunidad”. Y después de analizar lo Político en Roma y en la Edad Media donde podemos aprender infinitas ventajas de aquéllas sociedades, llegamos a la época renacentista, en la que, “al aparecer el Estado, el orden político empezó a independizarse del orden natural como un orden artificial con su propia verdad, y lo Sagrado empezó a dejar de legitimar lo Político y la política”. Lo cual plantea el problema de la legitimidad. Y se rompe una conexión clave: “Esto sucede cuando se considera todo el poder propiedad del pueblo. En este caso se atribuye a la democracia la capacidad de ser fuente de las legitimaciones…En rigor se pervierte la democracia”.
Y con estas primeras líneas en las que se exponen brillantemente los temas, uno sabe que en las siguientes 400 páginas encontrará miles de respuestas al problemón descrito, aprendiendo de lo bueno y malo de otras épocas. Solo hay que estar abierto a las sorpresas, a volver a admirar la realidad para aprender, dejando atrás los tópicos y mentiras que nuestra época nos ha metido en la cabeza.
Blas, esta semana ha acontecido hechos en el mundo que figuran con toda seguridad en los libros. Son hechos sorprendentes e inesperados que invita a una profunda reflexión. La historia del mundo se escribe día a día y como comentas, debemos estar abiertos a las sorpresas pero no sólo en los libros sino también en la vida real. Pero cuando los acontecimientos nos impactan, todos estamos condicionados por nuestras culturas e intentamos dar explicaciones a lo acontecido desde nuestros arquetipos sociales, económicos y políticos. Grave error. Sustraerse de lo que somos para entender los hechos acaecidos, no es nada fácil. Quizás lo inteligente es ser puro observador y no juzgar a los demás porque igual los equivocados somos nosotros. Aunque siempre nos quedará una percepción de lo bueno y lo malo porque eso es, a mi juicio, un lenguaje universal y se intuye. Los libros de historia están, como comentas, para aprender de lo bueno y lo malo de otras épocas pero la vida real, el día a día, generan hechos sorprendentes que nos invita a la misma reflexión.
ResponderEliminarAprovecho para darte la enhorabuena del vídeo que enviaste para el concurso. Además de hacerlo bien y que se te ve con ganas e ilusión, tienes razón, ya comentaste muy claramente tus ideas por lo que no deberían sorprenderse de tus planteamientos. Quizás tuviste que haber colgado ese vídeo desde el primer día en tu blog, es muy ilustrativo.
Otro libro que quiero recomendar en este sentido es: "Guía políticamente incorrecta de la civilización occidental", de José Javier Esparza y Anthony Esolen, editorial Ciudadela.
ResponderEliminarHola Blas,
ResponderEliminarPerdóname, creo que no he entendido bien (mis neuronas con tanto curro ya no llegan a más).
"...y lo Sagrado empezó a dejar de legitimar lo Político y la política." ¿ No pasa lo contrario en los estados musulmanes de los que tanto miedo tenemos y nos parece que no han evolucionado? En principio, la religión se aparta de la política y el poder durante la historia, algo que creemos que es bueno. A no ser que se refiera con "lo sagrado" a los valores. Entonces, sería otra cosa.
¿Estoy equivocado?
Pe el cristianismo es la única religió que separa política y religión, y otra cosa son los fundamentos que legitiman lo Político, que en nuestras mentes ignorantes identificamos con el Estado, siempre totalitario...Peor hay otras formas...
ResponderEliminarLee por favor, para no sospechar de teocratismo, la entrada en la que explico cómo compaginar cristianismo y poítica.
http://elalcaldedezalamea.blogspot.com/2010/09/como-compaginar-cristianismo-y-politica.html
Entendido. Gracias, Blas!!!
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