El pasado domingo, en un descanso del programa LA MARIMORENA de 13 TV dirigido por Carlos Cuesta, Pío Moa me decía que “en estos debates, más bien jaulas de grillos, no hay tiempo para argumentar.” Es cierto. Las tertulias televisivas son el ambiente idóneo para la habilidad de la consigna, no para la reflexión. Y de reflexión y de debate serio carece nuestra sociedad. Porque si bien es cierto que ha habido crisis tan negativas como la actual –y peores- quizá en esos momentos había cierto terreno para la cultura y el pensamiento que ahora parecen arrasados por el predomino de la información manipulada.
Así, en estos días en que la clase política es uno de los grandes problemas del mundo occidental, ha pasado desapercibida la entrevista publicada por El Mundo el pasado sábado a Viktor Orban, Primer Ministro de Hungría.
Es un político con principios y con capacidad para defenderlos. Lo último es importante. Es el líder de un partido con una gran mayoría que ha impulsado una nueva Constitución de su país que no ha gustado nada a la burocracia de la UE, que intenta condicionar las políticas de los países miembros aún a costa de atacar las costumbres y la cultura de cada nación para imponer el modelo de socialdemocracia anticristiana tan nefasto.
La entrevista no tiene desperdicio. La he releído varias veces y os dejo algunas perlas que muestran la clarividencia de un político de convicciones y sin complejos. Debe servirnos para la esperanza y para animarnos a buscar propuesta positivas que ilusionen a nuestra nación a la deriva:
Cristianismo y Europa:
Debemos respetar el pasado de Europa. Es un error pensar que el cristianismo no ha tenido un papel decisivo en Europa. Los valores y las instituciones europeas no se pueden mantener sin sus bases cristianas. Sería ventajoso para la UE reforzar sus raíces cristinas.
Constitución de Hungría
Nuestra Constitución respeta el cristianismo. Sin el cristianismo nuestra nación no hubiera sobrevivido los últimos mil años. La Constitución defiende la vida desde la concepción, porque si no defiende la vida ¿qué otra cosa podría defender? No es liberal ni conservadora. Es constructiva; una Constitución tiene que construir el bien común.
Cristianismo y sociedad
Una sociedad con valores cristianos es ventajosa incluso para los que no lo son. Los cristianos siempre estamos a favor de la libertad.
Economía
Nos hemos concentrado en bajar impuestos sobre los ingresos pero tenemos el IVA más alto de la UE, del 27%, ya que es más justo pagar cuando gastas que cuando trabajas para ganar dinero; sí, es socialmente más justo.
¿Qué me dicen? ¿Les parece un milagro? Dejen sus comentarios…